Advertencia: esta entrada se trata exclusivamente de Mi Vida, algo que me pasó y que creo debo compartir, tal vez su perspectiva me ayude a entender mejor las cosas, escribiendo me desahogo y me siento mucho mejor contándoles un momento clave de mi historia que me marcó y que ha dejado cicatrices.
“Querido
David no nos hemos comunicado en un tiempo y eso me ha dado un espacio que
necesitaba para pensar, ¿recuerdas cuando dijiste que debíamos vivir juntos, e infelices, para poder ser felices? Considera como
un testimonio de lo mucho que te amo que me esforcé todo lo que pude para lograr
que esa oferta funcionara. Pero, un amigo, me llevo al lugar más increíble el
otro día. Se llama el Augusteum. Octavio Augusto lo construyó para
conservar sus restos. Cuando llegaron los bárbaros, acabaron con eso y con todo
lo demás. El gran Augusto, el primer gran emperador Romano, como hubiera podido
imaginar, que Roma, el mundo entero como lo había concebido, estaría un día en
ruinas.
Es uno de
los lugares más solitarios y silenciosos en Roma. La ciudad ha crecido
alrededor a través de los siglos. Se siente como una herida preciosa, como un corazón
roto que no quieres dejar ir porque el dolor es placentero.
David: Me gusta el desorden.!!!
Todos
queremos que las cosas permanezcan igual David.
David: Creo que el que estuvo antes
de mi debió ser un ángel, ¿no?.!!
Aceptando
vivir en la ficción porque le tenemos miedo al cambio, a que todo termine en
ruinas. Luego vi alrededor del lugar, el caos que había permanecido, y la forma
en cómo se había adaptado, al ser quemado, saqueado, y luego vuelto a construir
una vez más, y me sentí tranquila.
Tal vez
mi vida no ha sido tan caótica, el mundo es el caótico, y la verdadera trampa
es atarse emocionalmente al caos. Las ruinas son un presente, las ruinas son el
camino a la transformación.
Aún en
esta ciudad eterna, el Augusteum me mostró que siempre debemos
estar preparados para las interminables olas de la transformación.
Ambos nos merecemos algo mejor
que seguir juntos porque tememos quedar destruidos si no lo hacemos.”
Eat, Pray, Love.